martes, 21 de abril de 2015

¿Qué es el scrapbooking?

A estas alturas de la película parece una pregunta tonta, ya nadie o casi nadie se extraña al oír esa palabra tan rara.
Hoy puedes entrar a la papelería de cerca de casa, a los bazares, centros comerciales etc y encontrar algo que te ayude a hacer scrap.
Ya todo el mundo que hace scrap sabe diferenciar entre el Craft, el Card Making y el Scrapbooking, aunque se usen para los tres las mismas herramientas, papeles etc.
Entonces porqué hacer esta pregunta??
Quizá no la he expresado bien, quizá la verdadera pregunta sea esta: Es el scrap lo que te imaginabas cuando comenzaste en el hobby? Lo veo como un hobby o lo veo como una moda? Realmente durará el scrap en nuestro país?
Yo no puedo contestar por ti, pero si puedo hablar de lo que mis alumnas me cuentan o yo misma veo.
A raíz de una de esas conversaciones empecé a pensar en lo que está pasando con el scrap sin darnos cuenta.
No hablo de los malos rollos o si copian o dejan de copiar etc, hablo de la carga que para muchos está llegando a ser el scrap.
Carga? Si y me explico.
El scrap ha llegado a lo grande en nuestro país en vez de poco a poco como en otros países.
Aunque lleva tiempo en España, realmente el bomm de este hobby ha sido de hace cuatro años para aquí. El motivo de que el scrap crezca de una manera tan grande son las redes sociales.
A mediados de 2007 Facebook lanzó las versiones en francés, alemán y español
En noviembre de 2009 apareció la versión de Twitter en español.
En octubre de 2010 aparece Instagram.
Pinterest Móvil fue lanzado en septiembre del 2011 y en diciembre de 2011 el sitio se convirtió en uno de los 10 más grandes servicios de redes sociales.
Este crecimiento ha hecho que nos hagamos “adolescentes” en el mundo del scrap antes de tiempo.
Hemos aprendido por vídeos técnicas que realmente son de bellas artes aunque aplicadas al scrap. Usamos herramientas cómo los grandes artistas, productos que ni en sueños pensábamos que tendíamos nunca.
Y a lo mejor no sabemos cortar bien con un cúter, una regla de metal y una tabla de corte, o saber que con la tabla de corte puedes medir ya porque tiene cm y pulgadas la mayoría.
Nos creamos necesidades de herramientas o productos que a lo mejor solo usamos una vez y nos conocemos todos los nuevos productos, colecciones o tendencias del CHA casi a la par que los propios distribuidores.
Por no hablar de las fotos que usamos para nuestros trabajos…
Recientemente en la feria de Sitges hubo un debate sobre eso, hemos pasado de scrapear las fotos que teníamos almacenadas, esas que salían con sombras, quemadas, a contra luz, con botellas de agua o la casa sin colocar, con los pelos de loca o la niña en pijama a limpiar la casa antes de hacer la foto (Al menos lo que se ve) vestir a los niños como si fueran a recoger los Oscar, poner poses increíbles para disimular lo que no se puede disimular, ir a cursos de fotografía, comprarnos unas súper cámaras de las que no sabemos usar ni la mitad de las cosas, editar las fotos, recortar, poner filtros etc y todo eso por las tendencias que se ven en las redes sociales. (No digo que eso sea malo, que conste)
Y es ahí donde entra el debate, lo que no se comprende es que lo que vemos en las redes sociales es en su mayoría ficticio.
Las que nos dedicamos profesionalmente a ello exponemos nuestra “vida” en el 80% por puro Marketing y más si trabajas para una marca.
Si se saca una foto de una taza de  café a las 8 de la mañana, simplemente es una manera de decirle al mundo que ya empiezas a publicitar: Bien que te vas a una feria, un taller, un viaje de trabajo o que empieza una mañana de publicidad de blogs, de equipos de diseño etc. El otro 20% es para decir que necesitas un café para afrontar todo eso.
Que si enseñamos cada 40 minutos un trocito de lo que hay por encima de tu mesa, simplemente es porque tienes que estar presente continuamente en las redes para poder seguir trabajando, que las marcas te tengan en cuenta o las tiendas vean tu trabajo para futuros talleres.
Y ahí viene el problema, imitamos lo que vemos y lo que vemos en este mundillo del scrap es lo que admiramos y lo que admiramos bien sea a una artista o a un trabajo, está ahí puesto para que disfrutemos.
Para que veamos las posibilidades de un papel, de una herramienta, de un producto. Por lo que no deja de ser Marketing.
Significa eso que ese proyecto que estoy enseñando no es Scrapbooking? No claro que no, lo que sí puedo decir, al menos en mi caso es que es muy diferente al scrapbook que yo realizo para mí, para mis hijas y mi familia.
Esos proyectos y páginas por decisión propia no las enseño ni en mi blog, ni en redes sociales, eso es solo para mi familia.
Ese 20% por decir así no pienso en que marca estoy usando, ni pienso si uso productos de moda, si la foto está bien enfocada o en la ropa que llevan mis hijas, en ese momento solo cuento mi vida, lo que quiero que quede para mis hijas.
Hace años vi una película llamada Ejecutiva en apuros. En el comienzo de la película se ve a 4 mujeres scrapeando juntas en la mesa de una cocina, mujeres de diferentes edades, hablando de sus problemas, comiendo pastas y disfrutando de su hobby.

Hay un momento de la película en la que una de esas mujeres le regala un álbum de fotos hecho por ella a la protagonista.

 Cuando la protagonista lo abre, ve una foto de ella sentada en un escritorio con la mirada perdida. Sorprendida le pregunta que no recuerda ese momento, que porqué se la hizo.
La respuesta de esta señora es la esencia del scrap, más o menos dijo así: “Te hice esa foto porque en ese momento parecía que llevabas todo el peso del mundo sobre tus hombros”.
Y eso es lo que quiso que recordara al poner esa foto en el álbum.
Cuando hacemos scrapbook no solo usamos fotos bonitas, intentamos que la foto que seleccionas cuente o resuma una historia que merece ser recordada.
Por lo que si comprendemos ese concepto, si las que tenemos el privilegio de impartir talleres logramos que nuestras alumnas comprendan la esencia real del scrap, el scrap seguirá más allá de una moda o una forma más de ganarse la vida ahora que es tan difícil.
Dejará de preocuparnos tanto si tengo el último papel, si se lleva lo que hago o si mi foto técnicamente está bien hecha.
Y eso está en nuestras manos, por lo que aprovechemos la oportunidad antes de que dejemos de ser “adolescentes” en el mundo del scrap y seamos “adultos” en el scrap con malas costumbres que copiarán los nuevos que comiencen.
Que lo que vean del scrap es para lo que realmente es, para conservar tu historia.
Y qué mejor manera de mostrarlo que esta secuencia de la película UP.




13 comentarios

Papelería Tamayo Legazpi 4 Donostia Guipuzcoa dijo...

Comparto contigo el 100% de tus palabras, lo has expresado perfectamente.xxxx

Rebeca Gonzalo dijo...

Jo, creo que has dado en el clavo, y más poniendo como ejemplo esa secuencia de "Up" una de mis películas favoritas: unas escenas con las que siempre lloro. Me apunto la otra película que mencionas, seguro que saco algo bueno de ella. Un besazo y gracias por un artículo tan profundo como éste.

margot y fiona dijo...

Qué gran verdad lo que dices.
Llevo viendo estos últimos tres años mas o menos, como lo que era algo mágico para mí, se está convirtiendo en algo que no se si será moda pasajera o se ha anclado firmemente en nuestro páis, pero desde luego veo cosas en este mundillo del scrap que no me gustan nada. Y lo que más me duele, es precisamente eso que tú has mencionado, falta sentimiento.
A veces pienso que el scrap es tomado en nuestro país como terapia consumista, y fíjate que digo, consumista.
Veo habitaciones repletas de materiales de scrap que luego no se corresponde con los resultados faltos de sentimiento...
En fin algún día comentaré en mi blog todo esto que pienso de este movimiento "social" que estamos viviendo.
Un saludo

Conchi Lo dijo...

Tienes mucha razón. Pero, seguramente habrá sitio para todos: para vender, para hacer cursos, para expresar sentimientos, para compartir con tus amigas y para encontrarte mejor tú misma.
Esta en cada una, ser adultas y saber verlo. Cuando te están vendiendo un producto y cuando te están enseñando un trocito de intimidad.
Es inevitable recordar lo bien que lo pasábamos, pero todo evoluciona.
Ya sabes que entiendo el scrap igual que tú, y espero que nunca se pierda. Al menos lo intentaremos, no?
Un besote muy fuerte

PD: Si te digo la verdad, el instagram a veces para la teletienda, pero es gratis, no? y si sirve para salir adelante... bendito sea.

gigi et moi dijo...

Manoli, no te falta razón en todo lo que argumentas y explicas pero, al final, es cada cual cómo quiera disfrutar de su afición. Sé que todo el mundo sigue estereotipos y copia comportamientos, a mi, verdaderamente me cuesta horrores seguir un plan. Hago en cada momento lo que me nace y no sigo un patrón simplemente porqué así debe ser, Sólo disfruto con lo que hago y es cierto que así me gusta transmitirlo. Hay quién me ha preguntado porqué no tengo DT o CT o equipo de diseño... llamemóslo cómo queramos. También me han dicho que sería bueno publicar algo diariamente o al menos, tres veces en semana... en fín... ¿Porqué? digo yo. ¿les gustará más lo que hago si estoy dale que dale? Yo creo que no, yo creo que hay que hacer según te dicte tu manera de vivir la vida y tus principios aunque no sea tan comercial o la tendencia social del momento.
Bueno, ya sabes que me encanta leer tus entradas y hoy me apetecía escribir éste comentario.
Sigue así, como siempre, auténtica.
Un beso enorme
Leti

Jardinet de paper dijo...

Cúanto me alegra leer tus palabras. Empezaba a sentirme un bicho raro en este mundillo. Yo tb doy talleres y como les insisto mucho en el incalculable valor de las emociones y recuerdos que adquieren niestros trabajoscon el paso del tiempo. Algunas de ellas me miran como un bicho raro y veo que sólo tienen intención de hacer algo bonito. Otras sin embargo agradecen la explicación...incluso se emocionaban con la lagrimilla...en fin... hay de todo y todas son buenas personas....cada uno elige su camino y su forma de verlo y disfrutarlo. besitos.Vera

Cristina dijo...

Yo cuando hago algún trabajillo siempre pienso en la persona para la que va dirigido, son pura emoción, las fotografías no me importa q sean de última generación, por ejemplo las antiguas son preciosas en si( quizá el sepia haga mucho) pero las de los años 69-70 suelen estar amarillo-rosa, que más da, la importancia es q represente algo, un momento irrepetible sin perder de vista la realidad. Supongo que ahora es moda, pero todo se calma y deja el poso de la creatividad adquirida y derrochada. Estoy feliz porque mi amiga Cris me metiera en este mundillo. Me considero muy emocional y he encontrado un hobby perfecto.

Montse dijo...

Ostras Manoli que razón tienes!!! me encanta cómo lo has explicado! es algo que las que llevamos tiempo estamos viendo! ahora todo el mundo copia, todo el mundo quiere imitar, estar ahí y ya casi no ves trabajos que te emocionen y te sorprendan! es una pena! yo reconozco que estuve un tiempo en la misma situación! no era yo, quería ser cómo ésas que estaban todo el día en las redes, hasta que me di cuenta que éso no me hacía feliz! me hace feliz scrapear, que me guste a mí! si gusta a lo demás bien, que no pues para mi se queda!!
Besotes artista!

Unknown dijo...

Se puede decir más alto pero no más claro, y en esta lucha estamos muchas, lo lograremos!! jejeje

Isabel dijo...

¡Vaya me he quedado sorprendida leyendo tu entrada¡ Creo que he perdido mi mirada ingenua e inocente sobre el scrap. No se lo que hay en la trastienda de esto, lo que se teje y desteje, si se que es un negocio, que el scrap se rige por modas tan tiránicas como cualquier moda. Se que es fácil caer en el consumismo, porque yo misma caigo en compras absurdas y me sobra la mitad de lo tengo. Pero leer que una cosa es lo que haces para ti y otra la que muestras, me ha dejado desconcertada. ¿Tanto cartón piedra hay en esto?
Itsabel

Raquel Reyes dijo...

Qué gran verdad y qué gran reflexión. A mí me gusta hacer scrap porque guardo recuerdos para mis hijos, me gusta pensar que algún día leerán esos journalings enormes que se esconden tras una página... Difruto enseñando e intento transmitir que no pierdan la fotografía de vista y que cada pequeño elemento refuerze ese sentimiento ese momento...
Y las modas, son modas, las tendencias, tendencias... Pero no perder el sentido del porqué es lo que le da valor y sentido a esta pasión por recordar y transmitir.
Yo sigo haciendo mi scrap, el que a mí me gusta y lo comparto, en mi pequeña casa que es mi blog...

Un beso enorme !!!

Manuela Navarro dijo...

Hola Isabel. Gracias por tu comentario.
A lo que me referia con diferencias en mis trabajos cuando son personales lo explico en la misma entrada. Cuando son para mi no estoy obligada a usar ningun producto o marca en particular. Simplemente creo un proyecto con lo que a mi me apetezca y quiera. No lo publicito y escribo en la misma pagina siempre mis crónicas. Me refiero a que no tengo que esconderlas en un bolsilo, sobre etc en el proyecto porque este se tiene que publicitar por hacerlo con el material de una marca para la que trabaje.
En todo momento hablo de lo que ocurre con las que trabajamos para marcas, tiendas, etc. Que solemos ser las que mas publicitamos en redes sociales.
Eso no significa que mi pagina o álbum no esté hecho con es mismo cariño que uno que es simplemente mío. Son las fotos de mis hijas o mi vida la que está allí reflejada. Pero como lo voy a exponer públicamente no me expreso o uso otras fotos que no me importan que se vean. Esta entrada simplemente era para recordar que lo importante es el scrap y la historia. No si necesito tener facebook, instagram o publicar 10 veces a la semana para hacer scrap porque las demás lo hacen.
Las demás lo hacen porque sea para una tienda o una marca, es parte de su trabajo. Simplemente. Un abrazo.

Anónimo dijo...

Gracias por tu aclaración, y por tu sinceridad. Te había entendido y tu reflexión me ha ayudado no sabes como y no tengo nada que ver con este mundo. Soy Isabel aunque ponga anónimo.